Las cajas de puros están diseñadas para proteger los puros de daños y mantener su calidad proporcionando un ambiente controlado. El interior de la caja suele estar revestido con madera de cedro u otro material que ayude a regular los niveles de humedad. Algunas cajas de gama alta también pueden incluir un sistema de humidificación incorporado para mantener los puros en óptimas condiciones.
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